No se puede minimizar ningún aspecto a la hora de analizar lo qué tener en cuenta al pedir un préstamo, porque todo detalle es incidente en la actitud y planificación del solicitante.
Desde dónde o a quién solicitárselo (o sea, personas jurídicas, gubernamentales o particulares), hasta la necesidad de tener que acudir a abogados especialistas para mediar ante el ente prestamista o resolver abusos o fallos en el cobro de los mismos.
Hay mucho qué tener en cuenta al pedir un préstamo y por eso no se puede ni siquiera tomar a la ligera el llegar a esa opción, mucho menos hacerlo sin el respaldo de socios o familia.
Aunque sea difícil abarcar todos los aspectos, con los que citaremos a continuación habrá un gran porcentaje de posibilidad de logro del pago en el tiempo y monto correcto, sin trastocar tu vida presente y futura.
Qué tener en cuenta al pedir un préstamo
Debes analizar tu situación financiera
Esto implica saber si realmente necesitas el préstamo, cuáles son las opciones que puedes tomar previo a ello (dilatar la compra, venta o pago a realizar; vender algún bien, canalizar un préstamo o herencia familiar más flexible).
Debes revisar tus ingresos y el crecimiento o variación de los mismos en el último trimestre. Cuáles son los gastos necesarios y/o recurrentes y los que se deben disminuir o suspender hasta pagar el préstamo.
Saber cuál es tu capacidad de ahorro real. Y de allí, calcular la cuota mensual que podrías pagar sin comprometer tu estabilidad económica.
Qué tener en cuenta al pedir un préstamo: Analizar el importe que necesitas y cuándo realmente podrás devolverlo
Debes solicitar solamente el dinero que necesites y elegir un plazo de devolución acorde a tu situación (incluso, de ese lapso, sumar 15 días o 1 mes, como forma de protección ante imprevistos).
Ten en cuenta que hay un truco / trampa en los préstamos: Sí optas por un plazo más largo, pagarás menos cada mes, pero más intereses en total. De optar por el plazo más corto, pagarás más cada mes, pero menos intereses en total. Los intereses son lo que más puede mermar a tu economía.
Qué tener en cuenta al pedir un préstamo: Realiza comparaciones
Busca y compara entre las diferentes opciones de préstamo que existen en el mercado y cuál es la entidad o persona más flexible al momento de cobrar (un seguro para ti).
Fíjate en el tipo de interés, comisiones, requisitos (especialmente fiadores o garantías), las condiciones y ventajas que ofrece cada entidad; evita a los que descuentan el primer monto apenas recibes el préstamo, ya que en algunos casos es usura y mal manejo de los tiempos, por favorecerse ellos.
Ahorra para futuras emergencias económicas
Algo qué tener en cuenta al pedir un préstamo es el colchón de seguridad para los gastos cotidianos, destacando: Alimentación, transporte, salud, servicios e imprevistos. Estos deberían ser ajenos al préstamo, para que no desvirtúes el propósito del mismo y el dinero rinda menos (así evitarás agobios o solicitar otros préstamos).
Este “colchón de seguridad” te permite no caer en impagos, morosidad o sobreendeudamiento.
Qué tener en cuenta al pedir un préstamo: Condiciones del contrato
Parece básico y obvio, pero muchos no leen el contrato, centrándose en el monto, un exceso de confianza o por el apremio del dinero. Antes de firmar el contrato, lee detenidamente todas las cláusulas y asegúrate de entenderlas (de no hacerlo, consulta a un abogado especialista).
Los aspectos que ameritan mayor atención son: El tipo de interés, plazos, cuotas, comisiones, gastos adicionales (administrativos), penalizaciones por retraso o premios por cancelación anticipada, garantías o avales requeridos, etc.
Cumple con las condiciones de contrato
La firma es un compromiso con implicaciones legales; así que una vez obtenido el préstamo, respeta el compromiso adquirido y paga las cuotas en el tiempo y forma establecidos (sí adelantas, que te informen y te asienten los nuevos montos de deuda). De tener algún problema para cumplir con el pago, comunícate con la entidad y busca una solución, es factible que flexibilicen algunos aspectos.
No dejes de pagar sin avisar, ya que eso traerá consecuencias negativas para tu historial crediticio y posible juicio, además de más y más deuda.
